Por Chucho Nery
Desde que en la República Bolivariana de Venezuela comenzó el llamado 'proceso de transformación' expuesto y llevado a la práctica por el militar retirado Hugo Chávez en 1999, los expertos en la materia lo han calificado de 'polarización' de la sociedad venezolana, utilizando diferentes categorías (cortinas de humo) para ocultar la verdadera lucha, la que en realidad siempre ha existido desde los tiempos de la Conquista española: desde gobierno-oposición, chavistas-antichavistas, dictadura-democracia, hasta tiranía-libertad, todas ellas, valga la concepción, polarizaciones horizontales que no hacen sino ocultar la verdadera polarización socioeconómica que ha estremecido estas tierras y las de todas partes desde el inicio de la 'civilización': enriquecidos-empobrecidos, amos-esclavos, señores feudales-siervos, burgueses proletarios, capitalistas-trabajadores, capitalismo-socialismo, de orientación vertical, la lucha de clases.
Esta polarización horizontal, que no mueve la historia sino que ralentiza su ritmo, pospone por un tiempo y en determinados espacios el resultado final e inexorable de la lucha de clases, le ha servido a los amos de siempre y sus demagogos de turno (capataces de la hacienda globalizada llamada planeta Tierra) para que las masas trabajadoras y empobrecidas del mundo permanezcan inconscientes, apáticas y conformistas ante su propia realidad diaria de explotación, dominación, discriminación, genocidio, y sumisión mental y de esa forma nunca sean capaces de luchar organizadamente contra sus opresores, es decir, que nunca se planteen su ser-existencia-trascendencia cotidiana como una polarización vertical (los de abajo contra los de arriba).
Durante la Colonia española la lucha de clases se planteó (de forma errónea por parte de los historiadores burgueses) primero entre españoles, portugueses, holandeses, franceses y británicos por la posesión total del territorio y sus esclavos 'indios' y africanos, luego entre españoles peninsulares vs blancos criollos, blancos criollos vs mestizos (los pardos, pues 'indios' y 'negros' nunca aparecen por ningún lado en la 'historia'), burócratas locales vs foráneos, más tarde entre realistas vs patriotas, monárquicos vs republicanos, cuando en realidad ha debido ser amos (españoles o criollos -blancos o pardos-) vs esclavos (blancos, mestizos, 'indios' o 'negros'). Durante la época republicana 'independiente' agrícola feudocapitalista se desarrolló la pugna clasista en términos de paecistas vs santanderistas, conservadores vs liberales, cuando ha debido proyectarse intelectual y materialmente como entre oligarcas vs campesinos (lo más cerca que se estuvo de eso fue durante la llamada 'Guerra 'Federal', en realidad lucha entre terratenientes y campesinos semiesclavos sin tierra, que degeneró en pugna interna entre oligarcas enriquecidos y empobrecidos por la lumpenburguesía comerciante que controlaba los puertos y los banqueros locales y extranjeros). Y finalmente, en lo que ha sido nuestra contemporánea época semicapitalista petrolera (pare ser exactos, desde 1920), las concepciones y acciones dentro de las cuales se ha desenvuelto la lucha de clases en Venezuela se ha visto empañada por los espejismos ideológicos antes mencionados, creados y propagados con la peor de las intenciones.
El primer intento realmente serio que trató de implementar una revolución socialista en Venezuela, encabezado por el Presidente Chávez y su MBR-200 (de corte estrictamente militar y que después transmutó en Movimiento V República, de naturaleza cívico-militar, hasta convertirse finalmente en el actual Partido Socialista Unido de Venezuela de esencia reformista, capitalista y policlasista) tuvo como consecuencia principal que las masas trabajadoras y empobrecidas (el mayor caudal de apoyo electoral de Chávez) tomaran conciencia de su condición de clase, de su fuerza como movimiento organizado y de su poder de transformación integral, en otras palabras, el mayor mérito del 'comandante supremo', su verdadero legado, fue haber conscientizado a los esclavos (asalariados o no) acerca de la real orientación de la lucha por su emancipación, de abajo hacia arriba, hacia adelante, y no en zig-zag, hacia los lados (derecho o izquierdo). Su verdadera herencia fue hacernos ver que nuestros verdaderos enemigos de clase no son los operadores políticos de la clase dominante local y mundial (sus burócratas), sus títeres, marionetas, gerenticos, capataces, cancerberos, que aparentar ser como nosotros, sino los que mueven los hilos, los que hacen hablar a los muñecos de ventrílocuo, aquellas figuras de madera vestidas de saco y corbata por fuera y huecas por dentro que tanto nos entretenían y hacían reír.
El Presidente Chávez, siempre orientando todo su esfuerzo mental y físico hacia los menos favorecidos en su afán esclarecedor, no hizo más que nutrirse de una vieja disputa histórica en el plano intelectual (que inexorablemente afecta a la lucha concreta en el plano organizativo) que se ha venido dando en el seno de los movimientos obreros, sindicales y de liberación nacional en su guerra contra los amos explotadores, que tiene que ver con las capas y sub-capas de pensadores e ideólogos que siempre se han disputado la dirección de la necesaria vanguardia revolucionaria, surgidos todos de los más diversos estratos sociales, y de allí las diferentes formas de concebir, dirigir y concretizar esa guerra por la sobrevivencia no sólo de la clase trabajadora sino de la especie humana como un todo.
¡Cuántos libros, discursos, declaraciones, acuerdos, resoluciones, exhortos, y programas no se han pensado, escrito y publicado sobre lo que hay que hacerse respecto al capitalismo, los capitalistas y sus medios de producción, comunicación y comercialización!: que si hay que ponerlos al servicio de los trabajadores, que si hay que abolirlos, que si hay que maquillarlos, que después de todo el capitalismo es bueno en el fondo, que sólo hay que 'educarlo', 'conscientizarlo', 'domarlo', 'humanizarlo'. Esta aclaratoria definitiva siempre ha sido una tarea histórica de los pensadores del campo socialista, en donde ningún intelectual burgués o al servicio del capital tiene nada que aportar.
Pero, lamentablemente, dentro de ese debate que sólo le incumbe a la clase trabajadora, a su conciencia y su accionar, siempre han metido sus narices, de manera interesada, los ideólogos al servicio de la clase burguesa capitalista, la clase dominante, para impedir que esa aclaratoria tan necesaria llegue a las masas y le facilite así su camino a la victoria, que no es otra que el derrocamiento del capitalismo y la instauración de la sociedad socialista. Ello con el fin de perpetuar, darle una prórroga, unos años más de vida a un sistema ya moribundo y caduco utilizando, irónicamente, la energía vital de quienes precisamente han venido padeciendo sus nefastas consecuencias y luchan por sacárselo de encima.
¡La mayor ironía que puede haber en este mundo es que los mismos esclavos (asalariados o no) ayuden a sus amos a perpetuarse en el poder y les sigan explotando y hasta exterminando!
Es sabido que esta sociedad se divide en dos clases, los amos dueños del capital y los esclavos (asalariados o no) dueños únicamente de su fuerza de trabajo, la que ha servido históricamente para crear y acumular ese capital. Arriba, dentro de la clase dominante, hay disputas entre grupos (corporaciones) por hacerse con el monopolio del poder (la globalización les ha venido facilitando esta tarea cada vez más). Esos grupos tienen a su servicio una sub-capa de intelectuales que les ayudan a 'educar' a sus futuros líderes y a las masas ignorantes (obviamente los líderes reciben una formación muy diferente que la que reciben las masas, de mejor calidad y verdadera, es decir, no la sarta de mentiras que les enseñan a nuestros hijos), y ese mismo proceso 'educativo' tiene como principal meta la creación de los líderes que dirán representar a los esclavos (asalariados o no), para que estos , en medio de la confusión que sus líderes se encargarán de incocular, nunca se liberen de sus cadenas y puedan seguir enriqueciendo a sus amos.
Estos 'lideres' así educados, llamados reformistas porque sólo enseñan y buscan maquillar al capitalismo para que los esclavos (asalariados o no) sigan creyendo que algún día podrán sacar algún beneficio de este sistema (“si lavo platos y ahorro mucho toda mi vida, algún día seré rico”), siempre se han hecho pasar por socialistas, ya que sólo con ese discurso (de la boca para afuera, claro está) pueden captar la atención de las masas trabajadoras y empobrecidas, matando así a dos pájaros de un sólo tiro, pues por un lado logran el objetivo de desmovilizar y por el otro de desprestigiar ante ellas la idea socialista y así que nadie nunca más se interese por ella.
Este proceso 'educativo' se nutre de aquellos esclavos (asalariados o no) que aspiran a dejar de ser esclavos (asalariados o no) y compartir las mieles del poder que disfrutan sus amos, hallando en el reformismo la ideología perfecta para sus aspiraciones, generando una sub-capa más (la inefable clase media), que entra en la lucha de clases a disputarle recursos y beneficios tanto a la clase dominada de la cual surgió como a la clase dominante que la educó y que, por supuesto, va a utilizar todos sus medios para que no ascienda más de lo debido y no se convierta en un enemigo más, pues ya es suficiente con tener que enfrentarse a sus iguales, los ricos de cuna, sus hermanos burgueses.
Esta clase media, con sus expresiones económicas (la pequeña y mediana industria, los comerciantes) y políticas (partidos, burócratas, intelectuales) es el elemento que alimenta la polarización horizontal, mediante la cual se enfrentan y desgastan los esclavos (asalariados o no) y desvían su atención de la verdadera lucha y del verdadero enemigo (polarización vertical). Sólo en el discurso es socialista, pero en el fondo, como se ve, es pro-capitalista, aspira algún día acumular el capital suficiente para competir con los de arriba, en un dos por tres, olvidando neciamente que los de arriba acumularon su capital en un proceso que ha durado milenios, y por lo tanto nunca podrán alcanzar semejantes niveles de poder económico, político y mediático (ideológico) de la noche a la mañana, por muy débil que esté la vieja clase dominante producto de sus crisis cíclicas y su desgaste natural.
Este tipo de aperturas, flexibilidades, distensiones sociales sólo pueden darse en tiempos de bonanza económica, de prosperidad, en donde incluso hasta en Europa de habló en un 'estado del bienestar' dirigido por gobiernos 'socialistas' (reformistas), siendo la envidia y el modelo a imitar por muchos otros gobiernos en el resto del mundo, sin olvidar que ese 'modelo' sólo fue posible, en un momento histórico dado, gracias a la progresiva explotación económica, dominio político, discriminación social, genocidio militar y alienación humana de continentes enteros acumuladas a lo largo de milenios, algo que no está al alcance de cualquier país o gobierno (reformista o abiertamente capitalista), razón por la cual dicho modelo no ha podido y nunca podrá ser replicado, ni cualitativa ni cuantitativamente.
Pero cuando llega la época de las vacas flacas, las crisis, recesiones y depresiones, entonces los reformistas se vuelven caducos, obsoletos, inútiles, y las clases dominantes deben echar mano de sus elementos duros, inflexibles, cerrados, tensos, tiránicos, que lancen una campaña de privatizaciones, que derrumben todo el entramado de beneficios socioeconómicos logrados por los trabajadores en décadas de lucha a muerte contra sus patronos y demagogos de turno (y no gracias a sus bondades programáticas o personales, como se nos ha adoctrinado), que desmonten el estado del 'bienestar' para aliviar el malestar de los capitalistas que ya no pueden obtener sus acostumbradas ganancias del 3000% sino que deben conformarse con sus piches beneficios anuales del 1000% (como ocurre con la actual crisis terminal y sistémica iniciada en 2008).
Esos no son otros que los neoliberales, globalizadores, financieristas que toman el control del barco cuando este amenaza con hundirse, y que irónicamente lo hunden más con esas mismas políticas.
De manera que el reformismo izquierdista sociocapitalista no es producto de la lucha del movimiento sindical ni de liberación de los pueblos, sino una necesidad histórica del capitalismo para poder sobrevivir unos años más. Mientras el neoliberalismo (agazapado mas no excluido) siempre está al acecho para salir al rescate (financiero) no sólo de los bancos (dejando a la deriva a los 'ahorristas'), sino del sistema como un todo.
Ese es el marco conceptual histórico en el que se mueve actualmente Venezuela y el mundo, la lucha entre clases dominantes (consolidadas y las que ambicionan desplazarlas) horizontalmente polarizada entre quienes aspiran a seguir administrando el capital (sus capataces criollos: chavismo-oposición, MUD-PSUV, patriotas-apátridas, que encubre la verdadera lucha entre los amos y verdaderos dueños de ese capital (no precisamente Obama y demás capataces metropolitanos del 'Imperio'), el 1% de la humanidad, y los esclavos (asalariados o no), es decir, todos y cada uno de nosotros, el 99% de la humanidad, la lucha verticalmente polarizada entre dominadores y dominados.
Para mayor sufrimiento hay que saber que inclusive dentro de esas mismas sub-capas se dan varias luchas a otros tantos niveles y dimensiones, en el marco de la lucha a gran escala entre las potencias emergentes y sumergentes, que las penetran e interpenetran, afectándolas e influyendo sobre y dentro de ellas. Por ejemplo, no hay que perder de vista que en el campo reformista socialista (ALBA-PSUV, que le abrieron las puertas al capital ruso-chino aspirando algún día formar parte del grupo BRICS, actual archi-enemigo de la dupla anglosajona EE.UU.-Unión Europea) hay quienes aun suspiran por volver a ponerse bajo el manto protector del moribundo capitalismo gringo, tocándose así con el campo neoliberal anglosajón (por ejemplo México y su TLC con EE.UU. y Canadá; Colombia, miembros a su vez del TPP, Alianza Asia-Pacífico para contrarrestar a China, para lo cual trabaja la MUD), para que vean Ustedes que las supuestas diferencias ideológicas de fondo entre chavistas y opositores son pura apariencia; y al mismo tiempo en el campo neoliberal se pueden apreciar corrientes abiertas y ocultas, esperando su oportunidad para aparecer en el momento en que sean necesarias, tanto en el eje anglosajón como en el eje BRICS, que sólo momentáneamente se muestra 'progresista' debido a su relativa bonanza económica, pero que en cuanto la crisis toque a sus puertas más fuertemente (como en Grecia, España o el mismo EE.UU.) mostrará algo más que las orejas para salir al rescate del Capital, que como ya nos hemos dado cuenta, no tiene color, olor ni sabor, y puede muy bien hablar inglés, ruso o chino, al igual que su antídoto neoliberal.
Chávez comenzó en latencia-tendencia como un reformista más pero fue sentando las bases para que Venezuela desarrollara su potencia-potencialidad e hiciera posible, en un futuro cercano, la realidad socialista. Con su lamentable muerte este proceso se vio truncado y lo que actualmente presenciamos es la evolución-involución del aun posible socialismo bolivariano chavista hacia un sociocapitalismo bachaquero bolicristiano que se debate entre su variante reformista (PSUV, incluyendo su lucha interna (¡más sub-capas!) entre la corriente madurista y la cabellista, que luchan entre sí para ver quién es más reformista, faltando por saber quién recibe apoyo político y financiero de Rusia y/o China o quién ya ha negociado la vuelta de Venezuela al patio trasero gringo) y su ala neoliberal (MUD, que no está nada unida sino que se diluye en una pugna entre electoreros y golpistas, y que no descarta una traición a sus amos gringos para saltar a los brazos del grupo BRICS, como buenos oportunistas que siempre han sido), con muchas probabilidades que ambas degeneren (y hasta se unan) en una peligrosísima corriente fascista (que logre el milagro de conciliar a Stalin con Hitler, pues recuerden que el soviético cometió sus millones de atrocidades en nombre del socialismo en un sólo país -y en 2 etapas- y el austríaco-alemán en nombre del nacional-socialismo -nazismo-, es decir, del socialismo también en un solo país, a la criolla, con sus propias características -¿les suena familiar?-; sin olvidar que ahí también está el modelo chino bastante avanzado en eso de controlar y reprimir una población de casi 2 mil millones de esclavos (asalariados o no), que también traicionó a su líder histórico y se desnaturalizó hasta convertirse en la actual potencia capitalista emergente que aspira a ocupar el vacío que ya van dejando EE.UU. y la Unión Europea). Históricamente, como dolorosamente lo han comprobado los trabajadores del mundo, cuando una sociedad queda vacía de teoría y colapsan las ideologías reformistas hace su entrada triunfal y nefasta el fascismo (esta vez evolucionado como globofascismo) con toda su carga de muerte y destrucción social y natural, que es cuando el capitalismo se quita su máscara 'democrática' y muestra su verdadera mueca, en lucha desesperada por sobrevivir.
Esta vendría a ser la actual polarización horizontal a nivel global (EE.UU.+UE vs China+Rusia), que viene a tapar la polarización vertical mundial verdadera (burgueses capitalista de EE.UU.+UE+China+Rusia) vs los esclavos (asalariados o no) del resto del planeta, de la cual es fiel reflejo la polarización horizontal y vertical venezolana e hispanoamericana, en su tortuoso camino hacia la polarización final y definitiva: la globofascistización vs el holocausto nuclear, la 'vida' en un planeta controlado mental y físicamente por hombres-máquina al estilo del mundo que vislumbró George Orwell en su novela “1984”, o la muerte en una roca estéril habitada por máquinas-humanoides acompañadas por sus mascotas las cucarachas (los únicos seres vivos capaces de sobrevivir la tóxica radiactividad nuclear -aparte de algunas bacterias-), al estilo de la película “Wall-E”.
Definitivamente uno tiene que pensar y actuar como un verdadero maestro para comprender este embrollado tablero de ajedrez multidimensional, polifacético, y por ello mantener una mente y cuerpo muy sanos y naturales para no caer en las pantanosas aguas de la ignorancia, la apatía y el conformismo y tener aunque sea una mínima oportunidad de sobrevivir dignamente en este Planeta Tierra.
