Zoltan Istvan, “La apuesta transhumanista” (Reseña crítica)

Después de leerlo de principio a fin, y leerlo después con más cuidado, tengo sentimientos encontrados de amor y odio acerca de esta novela.

Es un libro apasionante. Istvan, un ex periodista del canal National Geographic y del The New York Times, cuya premiada cobertura de la guerra en Cachemira ganó la atención mundial, sabe cómo contar una historia convincente.

Existe un claro paralelismo con “La rebelión de Atlas”. Jethro Knights, el protagonista de “La apuesta transhumanista”, es un moderno John Galt en versión transhumanista, e incluso más radical que el héroe de la novela de Ayn Rand.

Jethro está obsesionado y centrado en la consecución de la inmortalidad personal mediante la extensión de la vida biológica y, especialmente, por transferencia mental de la vida eterna cibernética.

Estados Unidos está en una profunda recesión económica, aumenta el desempleo y el terrorismo interno. Las ideas transhumanistas se hallan en el centro de atención, con la violenta oposición del "políticamente correcto" poder establecido, de los políticos ineptos y de un dominante y violento movimiento religioso, liderado por el archivillano reverendo Belinas.

En el primer tercio del libro, en la parte autobiográfica, seguimos a Jethro en su circunnavegación solitaria por el mundo en un velero que él mismo construyó, trabajando como periodista de viajes, guerras y lo que surja. En su barco, Jethro medita sobre las grandes cuestiones y problemas. Y cuando regresa a Nueva York, tras cinco años, él está dispuesto a luchar con Belinas y tomar el mundo. Y sí, hay una historia de amor. Se inicia en la zona de guerra de Cachemira y continúa después del regreso de Jethro.

Militante libertario

La filosofía de Jethro es una versión extrema y militante de la formulación radicalmente libertaria del transhumanismo defendido por el Instituto Extropy de los años 90. Conseguir la inmortalidad es un prerrequisito para convertirse en todopoderoso y poder dominar el universo. Así pues, la extensión vital debe tener la más alta prioridad, sin dejar que las distracciones innecesarias como la empatía, la compasión o el amor se interpongan en su camino.

Jethro es el icono bidimensional de una historia épica. A partir de los (pocos) intentos para darle profundidad, podemos ver que es probable que haya una buena persona en su núcleo, pero él es un fundamentalista igual que el reverendo Belinas al que se refiere en sus objetivos y perspectivas filosóficas. En el enfrentamiento final con Belinas, Jethro mata a su enemigo después de un fuerte choque de ideas, pero no sin que Belinas anote algunos puntos. Sí, Jethro podía cometer atrocidades en la persecución de sus objetivos, e incluso matar a las personas que más ama.

Soy un transhumanista radical, pero encuentro alienante el enfoque de Jethro. Puedo encontrar elementos dignos en las diferentes visiones del mundo, pero no creo que ninguna visión del mundo tenga todas las respuestas. Creo que en el fundamentalismo militante, en esa certeza de tener todas las respuestas y la voluntad de aplastar a los infieles, está la raíz de la mayoría de los males. La religión puede ser buena, pero la Inquisición fue una atrocidad. El ateísmo puede ser bueno, pero el opresivo y autoritario ateísmo militante, no lo es. El liberalismo es bueno, pero la indiferencia ante el dolor de los demás no lo es. El transhumanismo es bueno, pero espero que prevalezca sin la violencia descrita en la novela.

Hacia el final del libro, los misiles de Jethro destruiyen el Vaticano, causando la muerte del Papa y de cientos de creyentes en su oración en la plaza de San Pedro. Jethro contestaría que los actos violentos de la guerra ya fueron iniciados por otros (primero el gobierno de EE.UU., y después la coalición internacional), y los transhumanistas respondieron en defensa propia, después de advertir a la población que abandonaran las zonas seleccionadas para minimizar los daños colaterales. Pero lo que me parece mucho más difícil de aceptar es que, Jethro considera a las demás personas como prescindibles, y no lo detendrá tan siquiera los asesinatos en masa por genocidios a gran escala.

Por el contrario, el líder transhumanista Preston Langmore es un hombre de voz suave, agradable, un visionario humanista de ideas bien razonadas y que, tal vez, sus nietos lleguen a ser inmortales, sin esperar realmente en ver la inmortalidad en su vida. Sin embargo, él no tiene lo que se necesita para defender a los transhumanistas de los ataques cada vez más violentos. Después de que un científico líder transhumanista, trabajando sobre sustratos alternativos para la transferencia mental, fuese salvajemente asesinado y decapitado por los matones de Belinas, con el silencio cómplice del gobierno, es cuando Jethro decide que debe tomar la iniciativa.

Transhumania, el último refugio de Galt

El cada vez más popular Movimiento Transhumanista de Ciudadanos de Jethro, triunfa y presenta un ataque terrorista contra una instalación criónica. Pero el religioso Belinas, esta vez con el apoyo pleno y abierto del gobierno, en ese momento un estado policial distópico, amenaza con una violenta represión masiva contra los transhumanistas.

Jethro se escapa y crea el último refugio de Galt: Transhumania. Una comunidad flotante marina de alta tecnología, poblada por los mejores y más brillantes del mundo. Los ciudadanos de Transhumania desarrollan una ciencia y tecnología increíblemente avanzada, y poderosas armas para una confrontación final que saben que vendrá pronto.

Por supuesto, los buenos ganan ... pero ¿son realmente los buenos? Imponen una estricta regla a los "transhumanos" sobre el resto del planeta, con muchas cosas buenas, como la educación científica y oportunidad para todos. Pero también algunas medidas fascistas que personalmente no me parecen libertarias, en absoluto.

En “The Artilect War”, Hugo de Garis, dice que la dirección transhumanista, que desarrolla tecnologías para trascender la condición humana, en particular, la inteligencia artificial más que humana, se encuentra en un rumbo de colisión inevitable con la moral tradicional, la religión y la organización social. Él cree en un conflicto enorme con miles de millones de muertos que tendrá que suceder algún día, tal vez en este siglo. “La Apuesta Transhumanista” es probablemente la primera novela en abordar el escenario apocalíptico de Garis (Jethro aniquilaría al resto de la humanidad, si tenía que hacerlo.)

Realmente espero que la ficción de Istvan permanezca en la ficción, pero parece inquietantemente plausible. Si los transhumanistas necesitaran defenderse, posiblemente emergiera un Jethro.

Zen cuántico

Mi personaje favorito es la deliciosa Zoe Bach, el único amor de Jethro. Con una mezcla hereditaria de Oriente y Occidente, Zoe es un transhumanista espiritual que comparte el entusiasmo de Jethro para convertirse en inmortal y trascender la condición humana a través de la tecnología avanzada. Pero al mismo tiempo, se mantiene abierta a las formas más espirituales de la trascendencia que se encuentran en el misticismo oriental.

En su actitud de "Zen cuántica", Zoe no está tan centrada en la inmortalidad: imagina que ese futuro de super-ciencia será capaz de resucitar a los muertos. Jethro está de acuerdo, pero considera que las especulaciones de un lejano futuro son una distracción para el impulso irresistible de lanzar su revolución transhumanista, y alcanzar la inmortalidad aquí y ahora. La tensión entre Jethro y las filosofías de Zoe son, para mí, el aspecto más interesante de la novela.

El discurso transhumanista

Zoltan me dijo que "el objetivo principal del libro era crear una poderosa declaración artística para la joven generación actual de pensadores y lectores, sacar a los jóvenes de los géneros de fantasía hacia el transhumanismo. Mi novela está tratando de decir que el transhumanismo es tan emocionante y gratificante como cualquier cosa comercial de las que Hollywood pone ahí para ellos.

"Tengo la esperanza de que una persona joven que está en la universidad o en la escuela secundaria, pueda leer mi libro y decidir que prefiere seguir una carrera de ciencia y tecnología que, digamos, de negocios, derecho o publicidad. Si mi novela consigue convencer a la gente para seguir la ciencia y la razón en su vida cotidiana en lugar de la fantasía y el comercialismo, entonces me sentiré satisfecho."

Creo que “La Apuesta Transhumanista” es, de hecho, una muy poderosa declaración artística, pero que promueve una interpretación del transhumanismo que me parece demasiado militante y carente de compasión.

Al mismo tiempo, aunque Zoltan y Jethro no tienen todas las respuestas, plantean cuestiones importantes, y ofrecen algunas respuestas válidas. Encuentro su libertarismo militante en exceso y sin concesiones, pero al mismo tiempo, pienso que es importante afirmar que las ideas libertarias clamen alto y claro en el ambiente de lo políticamente correcto del opaco y anti-libertario clima cultural actual.

No creo que la ciencia avance tan rápido como las esperanzas de Zoltan, ni siquiera de una Transhumania en el mundo real, pero creo que es importante ofrecer a las generaciones más jóvenes unas visiones artísticas atractivas de un futuro solar y positivo impulsado por la ciencia transhumanista.

El libro de Zoltan tiene el potencial de convertirse en un libro de culto. Espero que sea ampliamente leído y discutido.

http://bitnavegante.blogspot.com/2013/05/zoltan-istvan-la-apuesta-transhumanista.html