Jerusalén, 1 oct (Nóvosti).
Tres soldados israelíes que combatieron en la ofensiva Margen Protector que el Ejército israelí lanzó en Gaza el pasado 8 de julio se suicidaron el mes pasado.
Los tres pertenecían a la Brigada Givati. Un mes antes, se quitó la vida un reservista al que llamaron para servir en el ejército en el norte de Israel en sustitución de soldados que se iban a Gaza. El reservista se suicidó poco después de llegar a la base donde estaba destinado.
Cada vez que un soldado muere fuera de combates o no por causa directa de su servicio militar, la Policía Militar abre una investigación. Solo al final de la misma se dice abiertamente si el soldado se suicidó. En la terminología oficial de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) se habla de posible suicidio.
Los tres cadáveres de los militares de la Brigada Givati que se suicidaron fueron hallados junto a sus armas. A uno lo encontraron el fin de semana pasado. Otro de los tres soldados es David Gordon, un chico que emigró a Israel sin familia. Estuvo desaparecido durante dos días hasta que se encontró su cuerpo en una acequia. Llevaba uniforme militar y su arma estaba junto a su cadáver.
Hace un mes, el diario israelí Haaretz informó de que la unidad de salud mental del Ejército israelí había tratado a más de cien soldados durante la ofensiva militar. Pero después de la guerra, el número de militares que recibieron asistencia psicológica aumentó y el Cuerpo Militar urgió a todos los soldados que necesitaran ayuda psicológica a ponerse en contacto con esta unidad.
El Ejército está considerando la posibilidad de buscar el apoyo de médicos civiles que tratan a reservistas a través de organizaciones sanitarias y seguros médicos. También tiene intención de mandar mensajes de texto a los móviles de todos los que participaron en la guerra para intentar contactar con los soldados que han desarrollado patologías como la llamada "neurosis de guerra" u otras reacciones psicológicas producto de su participación en la guerra.
El Cuerpo Médico también ha mantenido conversaciones con compañías y secciones enteras del Ejército que lucharon en la guerra, especialmente con los que pasaron por situaciones difíciles como los de la Brigada Golani, que combatieron en el barrio de Shayahia, en Gaza ciudad.
En 2013, siete soldados se suicidaron, seis que estaban llevando a cabo el servicio militar y un comandante. Un alto rango militar indicó que no había ningún tipo de prueba de que existiera ninguna relación causal entre el suicidio de los soldados y el servicio militar.
El Ejército aseguró que el número de suicidios de militares que se produjeron en 2013 fue el más bajo de la historia y atribuyó el descenso al hecho de que restringió el acceso de los soldados a sus armas y llevó a cabo otras iniciativas para prevenir los suicidios.